De entre toda la basura que reponen en televisión cuando se acerca el verano, de vez en cuando te vuelven a poner una de esas películas que no te importa ver una y otra vez. Es más, con el paso de los lustros te parece que tales películas son mejores de lo que eran antaño. En mi opinión este es el caso de “PULP FICTION”, auténtica obra maestra de Quentin Tarantino, superando otros títulos suyos tan notables como “KILL BILL” o “RESERVOIR DOGS”.
A finales del siglo pasado la puede ver unas veinte veces, llegando incluso a aprenderme muchos diálogos de memoria. Desde entonces, creo que no la había vuelto a ver.
Pero el otro día, los programadores de tv de La Cuatro, me hicieron el favor volver a ponerla. Que queréis que os diga, ahora que la veo con más de treinta tacos, creo que me gustó incluso más que la primera vez. Detrás de esa fachada de película de tiros para adolescentes se encuentra uno de los grandes, grandes títulos de la historia del cine.
- ¿Y que tiene que ver esto con el póquer?
Pues tiene que ver, la conexión es muy rebuscada pero tiene que ver.
Veamos… no recuerdo que salga ningún naipe o ninguna timba en los ciento y pico minutos de metraje… tampoco sale ningún mafioso multitableando en busca de rake-back. ¿Casinos?, pues no, tampoco sale ningún casino. Entonces, ¿Dónde está la relación con el poker? Ya os he dicho que es muy rebuscada:
Centrémonos en la primera aparición de Bruce Willis (en adelante “Buch”) en la peli:
Buch es un boxeador veterano, que está a punto de recibir un soborno por parte del mafioso malo malísimo de turno (Marcelus Wallas) a cambio de dejarse perder. (Os recomiendo encarecidamente que pongáis esta escena los que tengáis la peli grabada). Marcellus wallas emplea un discurso ejemplar, lleno de cordura y sentido común para convencer a Buch de que se deje perder a cambio de un fajo de dólares. Ni el tío más íntegro, honesto y sincero del mundo (por ejemplo J.L. Rodriguez Zapatero) hubiese rehusado la oferta de Marcelus ante una plática tan ejemplar y el montón de billetes que le acercaba en un sobre.
No es objeto de este escrito el reproducir la conversación íntegra, me basta con recordaros que el discurso termina tal que así…
Marcelus: Recuerda, en el quinto asalto tu culo irá a la lona… (insite Marcelus mientras le acerca el sobre con la pasta a Buch)
(Buch se lo piensa un poco, y finalmente hace ademán de coger el cash, pero Marcellus todavía no se lo da)
Marcelus: Dilo!
Buch: En el quinto, mi culo irá a la lona.
( por fin Marcelus le entrega el sobre)
…Y es en mitad del discurso cuando aparece la conexión con el póquer:
Marcelus: A muchos les pasa. Cuando subas al ring sentirás una punzada en la cabeza… y te vendrán las dudas… no le hagas caso… es el orgullo que intenta joderte! Recuerda, SI NOTAS ESA PUNZADA, SERÁ EL ORGULLO QUE INTENTA JODERTE!!
Bueno, que?! ¿Nadie ha notado esa punzada nunca?
Yo sí…, pero no por dejarme perder, ni por ser sobornado, la he notado jugando al poker. Seguramente si eres jugador de holdem tu también la habrás notado. No pocas veces tu voluntad habrá sido presa del TILT; ¿Y qué es el tilt? El tilt es ansiedad, el tilt es miedo ante lo desconocido, y ante lo malo que pueda venir. Pero por encima de todo eso, el tilt es el orgullo, que intenta joderte, a ti, y a tu bankroll.
Por ejemplo:
Te reparten KK, subes, te resuben, vuelves a subir, vas all-in y el villano te saca dos ases. A tomar viento tus reyes. Parece que sólo has perdido una caja, pero has perdido algo más… tu todavía no lo sabes, pero el tilt ha comenzado a trabajar: La nuca se te va poniendo tensa y te caen un par de gotas por la sien. Es la punzada del tilt que se va metiendo poco a poco... inside…
Un par de rondas después…
Te reparten un par de ases, subes preflop como dios manda y se te vienen dos limpers hasta el flop. Flop 68J y no tienes posición. Metes la continue bet para ver si te quedas con el bote a las primeras de cambio. El primero se tira, pero el segundo te raisea el bote entero metiendo casi media caja…
… Y aquí llega el momento clave. ¿Notas ya esa punzada?, ES EL ORGULLO, QUE INTENTA JODERTE!!! Te dice que vayas all-in que no puede ser que te vayan a chafar también tus ases (tu subconsciente está que trina con los dos reyes que te han chafado hace un par de rondas… inside…). Te dices a ti mismo “No puede ser que lleve el Set!!!, Me está faroleando, seguro!!!”.
¿Lo notas ya? ES EL ORGULLO, QUE INTENTA JODERTE!!! Vas all-in, y te enseña una pareja de ochos. ¿Lo ves, tarugo? Te dije que el orgullo te acabaría jodiendo, a ti y a tu bank.
Tu no lo sabías, pero ya estabas on tilt desde hacía un par de rondas. Si consigues identificar esa punzada y reprimirla, te auguro muchos dólares para tu bank. El tilt te nubla la vista y las ideas alejándote del pensamiento racional equilibrado. No olvides que tal pensamiento racional es lo que separa a los jugadores profesionales de los simples gamblers.
MORALEJA: … Es que eso es como todo!
3 comentarios:
Todas las medias cajas que nos ahorramos cada vez que evitamos que "el tilt fiction" intente jodernos, nos hacen subir el winrate más que las cajas completas que ganamos con la nut. La escena no tiene desperdicio, y se completa con el colofón de cuando Bruce Willis y Marcellus Wallace se están pegando en garito de Zet, del otro tipo y del Tarado. Otra escena insuperable es cuando Bruce se cruza en la barra con Travolta:
-¿Qué estás mirando amigo?
-Yo no soy tu amigo, palurdo.
-¿Qué has dicho?
-Yo diría que me has oído bien, sonado.
El silencio que viene después es estridente.
mmm... entonces Butch no era un boxeador acabado, rastrero, sobornado y vendido, sino que era un profesional con carné de identidad.
Claro!, es que eso es como todo
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